La emergencia sanitaria por el COVID-19 y los largos meses de encierro han llevado a muchas personas a incursionar en distintas actividades para las que jamás habían encontrado el tiempo suficiente. Entre ellas, la composición y creación de música de todos los géneros se ha convertido en un fenómeno de crecimiento exponencial durante el último año.

Poder transformar en realidad cualquier idea creativa desde la comodidad del hogar y con solo un ordenador, ha despertado el interés en este trabajo, especialmente entre los más jóvenes.

La importancia de contar con un ordenador adecuado
Más allá de que en la actualidad es sencillo encontrar todo tipo de software y herramientas para componer nuestras propias canciones desde casa, se necesita contar con un ordenador potente. El principal problema con el que se encuentran muchos aficionados de la música es que sus equipos no tienen la capacidad para procesar audios de alta calidad. Esto dificulta enormemente el proceso de producción.

En este sentido, los especialistas del sector recomiendan optar por ordenadores o laptops de última generación como las MacBook de Apple. Estas inigualables piezas de ingeniería no solo cuentan con procesadores avanzados que les permiten procesar y transformar pesadas muestras de audio, sino que también poseen chipsets que las convierten en verdaderas fuentes de sonido de alta calidad.

No obstante, no es necesario gastar una gran cantidad de dinero para comprar un equipo acorde para la tarea. Es posible conseguir una MacBook Pro de segunda mano por mucho menos de su precio de lista en un comercio especializado. De esta manera, se pueden dar los primeros pasos en la creación musical sin sufrir el fuerte golpe al bolsillo que representaría adquirir un ordenador último modelo.

Internet: una fuente inagotable de información
Una importante ventaja de lanzarse a la práctica de una actividad como la composición musical es que se puede conseguir toda clase de tutoriales y consejos en forma gratuita en la red. Sin importar la plataforma escogida para componer las canciones, miles de entusiastas y profesionales ponen a disposición sus conocimientos y experiencia para ayudar a los novatos del rubro.

Los servicios de streaming de música han contribuido asimismo al crecimiento del fenómeno. Con su facilidad de acceso a nuevos artistas, favorecen una difusión masiva de los nuevos talentos tanto a nivel local como en el resto del mundo.